Las hierbas de San Juan: medicina popular y magia ancestral
Se acerca San Juan. Hogueras, purificación, rituales y ¿superstición? Quizás. Pero somos muchos los que cada año preparamos cuidadosamente nuestra mezcla de hierbas y las dejamos en agua, al sereno durante toda la noche, para lavarnos la cara al día siguiente. Porque haberlas, haylas…
Siete hierbas en agua de siete fuentes
Cada zona tiene sus costumbres y las plantas recolectadas varían, aunque la base es la misma: siete hierbas, todas ellas con propiedades medicinales y mágicas. La tradición dice que hay que atarlas y sumergirlas en agua de siete fuentes (esto ya es más complicado). El rocío y la luna se encargarán del resto.
Si no tienes tu receta particular, ésta puede ser una opción:
- Espantademos o Hierba de San Juan (Hypericum perforatum): Es cicatrizante, antiséptica, astringente, diurética y antidepresiva. Se dice que ahuyenta a los malos espíritus y a las meigas.
- Fiúncho o hinojo (Foeniculum vulgare): Además de funcionar muy bien como diurético y digestivo, se utiliza popularmente contra el mal de ojo.
- Romeu o romero (Rosmarinus officinalis): Tiene efectos estimulantes y tónicos, que ayudan durante el proceso de recuperación de enfermedades respiratorias y del aparato digestivo, así como de afecciones del hígado. También es cicatrizante, alivia dolores musculares y fortalece las uñas y el cabello. Por si fuera poco, se le atribuyen efectos mágicos como purificante y protector.
- Hierba Luisa (Lippia triphylla): Como remedio natural, se caracteriza por su acción digestiva y tonificante, mientras que en el campo esotérico se usa para hacer rituales y hechizos amorosos.
- Xesta o retama (Cytisus scoparius): Su aroma es muy parecido al de la miel. Destaca por su propiedades purgantes, diuréticas y por su empleo para aliviar la ciática y las enfermedades reumáticas. Por otra parte, era una planta sagrada para los druidas celtas y sus ramas se emplean para barrer las casas, purificándolas y protegiéndolas.
- Fieito o helecho macho (Dryopteris filix-max): Se considera un buen antiparasitario, pero si la dosis es excesiva puede resultar tóxico. Para compensar, entre sus propiedades mágicas está la de atraer a la buena suerte.
- Malva (Malva sylvestris): Hay un refrán que dice “con un pozo y un malvar, boticario de un lugar” así que, si alguien quiere hacernos la competencia, que sepa que esta planta es buena para la tos, la faringitis, la afonía, las quemaduras, los granos, los furúnculos, las llagas, las picaduras de insectos, la conjuntivitis, el asma… Y, al parecer, suaviza el carácter y trae suerte en los negocios y los juegos de azar.
Extras que nunca están de más
Cuando tengas tu mezcla base, siempre puedes hacer los añadidos que consideres. Aquí te dejamos algunas sugerencias:
- Sabugueiro o saúco (Sambucus nigra): Reduce las inflamaciones, calma la tos, purifica la sangre y estimula la transpiración. Sus frutos se llaman también uvas de bruja. Se utiliza para espantar sapos, serpientes y el mal de ojo.
- Salvia (Salvia officinalis): Tiene propiedades balsámicas, antiinflamatorias y antisépticas. Según la leyenda, proporciona sabiduría y salud.
- Menta (Mentha piperita): Alivia los problemas de estómago, mejora la digestión, funciona como expectorante… y se usa en hechizos de curación y purificación.
Imágenes: Fir0002, Manuel Martín Vicente y David Short
Etiquetas: plantas medicinales, san juan
Deja un comentario